jueves, 3 de marzo de 2022

La licencia no sirve para nada…hasta que la necesitas

Anoche, percance haciendo randori de proyecciones, las costillas espachurradas; me cuesta respirar, ligero mareo…a ver si va a haber una fisura o algo más grave que el simple golpe.


Por suerte las lesiones no vienen muy a menudo, la última vez que tuve que pisar un hospital por una lesión se remonta a décadas. Por lo tanto, el seguro médico de la licencia no se usa nunca… hasta que llega un día en que sí. Pues para eso está.


El hospital de referencia del seguro más cercano ha sido el HLA Universitario Moncloa (Av. Valladolid, 83). (Aquí https://buscador.asisa.es/deportivas podéis mirar que hospitales están incluidos en el seguro).

 

Así que a urgencias, y con las costillas recién espachurradas como para buscar los cheques, el parte de lesiones y demás historias.

Al llegar me piden el DNI para escanearlo, la licencia (también para escanear, por lo que les sirvió una foto por whatsapp); Y al no llevar el parte ni el talón me hicieron firmar un escrito como que quedaba pendiente la entrega de dichos documentos.

Me atendieron y por suerte, y para más alivio por mi parte, no había nada roto, solo el golpe.

Solicito a la federación los documentos para accidente y me envían por correo electrónico el parte y los talones (5 talones 15€. Hay que entregar un cheque cada vez que se va al hospital).

  

Imprimo el parte y un talón, los relleno, los llevo al hospital, y todo listo.


Sin licencia, el coste lo pagas tú; o te toca ir a urgencias de la seguridad social, pero no digas que te lo has hecho entrenando, o el coste lo pagas tú.

De todos modos, la licencia no vale para nada… hasta que la necesitas.



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